¡No leas más prensa! Así de entrada, sin miramientos, sin rodeos… Dejar de leer prensa es uno de los hábitos que he incorporado a mi vida, y  creo que ha sido de los más difíciles de llevar a cabo. Principalmente, porque desde el boom de la era digital, existe prensa de todo tipo y a solo un click.

Seguramente pienses «Cristian se ha vuelto chaveta…». Pues no, de momento no…

Te preguntaras, que tiene de malo el leer prensa, o consumir información de los medios. «Tienes que estar informado para ser [pon tu palabra favorita aquí – culto, alguien de provecho … -]».

¿En serio?, esa es una parte del problema, el estar informado, pero ¿de qué manera? ¿a qué precio?

Prensa, ¿a qué precio?

En el mundo en el que vivimos, en el que preferimos las noticias de última hora, independientemente de que el contenido verídico de la noticia sea normalmente de un 10 – 20%. Si realmente tiene algo de cierto… Porque aquí no se escapa ningún tipo de medio. Ni medios de sucesos, ni deportiva, ni tecnológica, ni del corazón. Entre las «fake news», que hasta medios bien reconocidos de nuestro país se han creído y han difundido, de que por enésima vez «Neymar quiere volver al Barcelona», que si Leticia le ha vuelto a hacer un feo a Sofia, y por no de la cantidad de noticias morbosas, o de titulares de noticias que luego apenas tienen que ver con la noticia… basta ya de tanta basura…

Lo siento, pero yo soy de los que piensa, que para estar mal informados, mejor no estar informados. Además si hay algo que realmente es tan importante, me acabaré enterando a través de algún familiar, amigo o conocido.

Otro de los motivos por los cual no leo prensa… es porque la gran mayoría de veces, las noticias no son nada agradables, y no transmiten nada positivo. Y para contagiarme de negatividad bien sea desayunando, en los 10 min que paro a almorzar, o en cualquier otro momento. Pues la verdad que elijo no estar ni mal informado, ni contagiarme de negatividad.

Y después de varías semanas aplicándolo… Me reafirmo, que me entero de las noticias más importantes por la gente cercana, y a parte de que no pierdo mi valioso tiempo en noticias que poco tienen de cierto.

Photo credit: torbakhopper

Desde hace algunos meses atrás no escucho la radio mientras trabajo. Ni emisoras musicales, ni «morning shows»… Cosa que era una costumbre habitual para mí, realmente no pensaba que me perjudicara, sino más bien al contrario, sino que me haría más llevadera la mañana.

Pero no… Desde hace algunos meses, estoy realizando varios cambios en mi vida, en busca de la ultra-productividad. Aplicando nuevas rutinas diarias productivas durante mi jornada. Y aunque algunas de ellas las he tomado prestadas de gente que me inspira. También he creado algunas observando y analizando a mi persona. Entre ellas, no escuchar la radio mientras trabajas.

Es un habito que he dejado de hacer por diversas razones.

Motivos por los cuales no escucho mornings shows

Los motivos principales por los que no escucho mornings shows durante mi jornada de trabajo. Tener una voz o normalmente varias voces, de forma constante hablando..:

• No prestar toda tu atención o gran parte de ella, en tu trabajo.
• Reaccionas y/o reflexionas sobre lo que dicen.
• Divagas con más facilidad en pensamientos que nada tienen que ver con tu trabajo.
• Si consigue llamar tu atención, estarás más pendiente de entender toda la conversación y perderás el foco de tu tarea.

Tampoco escucho la radio mientras trabajo

A parte de no escuchar mornings shows para trabajar, tampoco escucho ninguna emisora mientras trabajo. Principalmente porque cada hora en punto o cada media hora, suelen informar de las noticias del día y última hora. Y ya no es que no quiera estar informado (que eso traerá otro futuro post), sino que de la misma manera que los mornings shows, las noticias hacen que tu mente se quede pensando en dichos sucesos y pierdas también el foco. Además que aunque no sea un morning show, en los programas musicales es habitual también escuchar a los locutores haciendo comentarios, por no hablar de las molestas cuñas publicitarias, diseñadas para captar tu atención…

Y no, no tengo nada en contra de las emisoras de radio, ni de los morning shows, ni programas musicales. Únicamente considero que personalmente, mientras trabajo, la radio me perjudica más que ayudarme.

Photo credit: Pete Jelliffe

¿Por qué ser freelance?… es una de las preguntas que me realice a mí mismo, antes de dar el salto al vacío. Dejar un empleo estable, donde estaba con contrato indefinido, y un salario nada malo para ser programador en la provincia de Tarragona, 28.000€ brutos anuales.

En mi caso, llevaba combinando el trabajo asalariado (presencial), con crear StartUp’s propias desde casa y también realizando tareas para algunas empresas que solicitaban mis servicios.

Lo que al final era una verdadera locura, tener contratos con varías empresas a la vez, querer dar lo mejor de ti a cada una de ellas, y no de disponer ni del tiempo, ni de los horarios adecuados para llevarlo a cabo. Todo eso suponía, no poder atender a mis clientes como ellos se merecían, no poder realizar un trabajo de calidad, sacrificio de vida personal y social… Ya que mi jornada en el empleo presencial empezaba a las 7.00 am, finalizaba entre las 15h – 18h. Al finalizar mi jornada, me desplazaba hasta casa directamente (los días que no tenía reunión presencial con alguno de mis clientes). Y sin apenas tener ni un momento para mí mismo, empezaba a trabajar para cada uno de mis clientes.

A pesar de este caos, intentaba tener una cierta organización, trataba de trabajar cada día en 1 o 2 proyectos como máximo, y los priorizaba las tareas y proyectos en función de urgencia de entrega de las tareas. También trataba de cumplir siempre con las entregas, y de ofrecer la máxima calidad posible en el trabajo realizado. Y eso además me suponía que la mayoría de días, terminaba mi jornada, entre las 23h y las 02h, para el día siguiente volver a empezar.

Los motivos por los cuales ser freelance

Aquí os voy a comentar mis motivos por los cuales decidí dejar mi empleo y ser freelance.

• Ofreces un mejor servicio a tus clientes.
• Tienes la posibilidad de adaptar la jornada de trabajo en función del volumen de trabajo.
• Flexibilidad en tu jornada laboral.
• Las empresas valoran tratar directamente con la persona que va a realizar el trabajo.
• No tienes un jefe que priorice sus ganancias, por encima de la calidad del trabajo.
• Todas los beneficios son para ti.
• Conoces mejor a tus clientes, y sabes exactamente que necesitan.
• Eliges tus vacaciones y la duración de las mismas (eso si, teniendo en cuenta a los clientes y las tareas).

En futuros posts, también publicaré los contras de ser freelance.

Photo credit: Jeffrey Smith